Francisco Espinosa "Por la Sagrada Causa Nacional"

 

Plaza de toros de Badajoz. Agosto de 1936

 

Primera edición. Enero de 2021


 

Francisco Espinosa (1954)

 

 

El guardia civil y comandante militar Agustín Díaz Mayo era conocido por “El tío del campanillo” por liderar la partida fascista que sembró el terror en la zona (de San Vicente de Alcántara) -llevaban en el coche una campana que hacían sonar cuando entraban en los pueblos-.

Enrique Santos da los apodos del grupo que acompañaba al guardia civil en sus acciones terroristas. Les achaca crímenes, purgas, rapados, robos y violaciones. Los detenidos eran torturados en la sacristía antes de ser llevados al paredón. El cura don Facundo lo toleraba. El guardia civil Ramos organizaba unos actos a los que llamaba las «fiestas de la muerte». Cuando los detenidos eran gente de cierta relevancia hacía sonar el campanillo para que la gente acudiera. Como en otros pueblos mujeres de derechas jaleaban el ambiente desde los balcones. Los detenidos llegaban destrozados; algunos eran arrastrados atados a colas de caballo. Santos narra cómo eran los «desfiles»: «mujeres atadas a una larga soga; algunas niñas de corta edad asidas a la falda de sus madres. Todas con lacito y su puño en alto gritando una frase obligada: “Somos comunistas”». Los fallecimientos no eran inscritos en el registro y a los familiares les estaba prohibido recoger los cadáveres. Las viudas tuvieron además que pagar multas. Y concluye: «Las gentes se volvieron piadosas y aprendieron donde estaba la Iglesia. Antes no lo sabían». Temían los informes del cura. (E. Santos, El secretario. Revelaciones sobre la guerra civil en Badajoz, Imprenta Campini, Badajoz, 1984, pp. 267 y ss.).

Leer capítulo La Represión



Comentarios

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

Mikel Laboa eta Xabier Lete "Izarren hautsa"

Un siglo de José Hierro. 1922 - 2022. "Llegué por el dolor a la alegría"