Henrique Mariño "Queridos hijos, me matan por ser bueno y querer que no padezcáis hambre: cartas de republicanos condenados a muerte"

Benito Prieto. Retrato de Manuel Estévez Gómez. 1937 Un día antes de que lo ejecutasen, Manuel Estévez Gómez le envió a su familia una carta sobrecogedora en la que explicaba el motivo de su muerte a manos de "todos esos canallas que se llaman representantes de la justicia". Fechada el 28 de enero de 1937, se dirige a sus "queridos hijos" y en especial a Emilia, la mayor: "Me matan por ser bueno, por querer que vosotros no padezcáis hambre y no andéis descalzos; en una palabra, por defender un gobierno que estaba constituido". Este albañil de Tui escribe con dificultad, comete faltas de ortografía y evidencia que no pudo ir a la escuela, pero entiende quién es y a qué mundo pertenece. "Es la carta de un obrero que no sabe puntuar. Un hombre pobre que carga con seis hijos a los treinta y cuatro años. Un trabajador que se afilió a la CNT para que defendiese sus derechos laborales, aunque quizás no tendría mayor vinculación con el sindicato, ni sabrí...